miércoles, 30 de septiembre de 2009

El Tren

El Tren

La estación del tren ha cerrado.
Ya no escuchare su silbato
Ni sus ruedas contra el acero.
Los vidrios de mi ventana ya no se cimbra.
¿Ahora, quién será el que me despertara por la mañana?

Luisa Albarrán

Carta a mi Suegra

Carta a mi Suegra

Podría comenzar escribiendo ¿Cómo está? ¿qué tal su día? Espero que se encuentre bien… Pero no. Para qué esos formalismos puros, natos e hipócritas, ha de saber que cada vez que paso por su cuadra lo primero que pienso es hacerla trizas, que le pase el tren, le corte las piernas, quede lisiada; para que sepa lo que es el dolor puro, neto y loable.
Y nada más por su puritito gusto de negar a su nieta, venirme a decir que no fue la sábana o el colchón --¡qué bárbara, señora!—pero que se puede esperar de alguien que no ha podido encaminar a su hijo, que prefiere irse con su Laurita al Depilite como si Laurita fuera la última maravilla del mundo entre tanta grasa ni el bello le ha de salir. Pero para qué hacer berrinche con alguien que es mitómana y que está aferrada y encaprichada con la carnita de su hijo.
Me imagino que ya la ha de ver convencido que es una buena mujer, que es la más pura y la más santa. Ojalá que también haya visto que es la más insatisfecha, la más volátil, que le dicen ¡mi vida! Y ya está enjaretada en la cama. Mire que encuerársele a su hijo en la sala de mi casa. Mandarle mensajes al celular diciendo que le urgía sentir la verguita en su vagina. Y eso no es para espantarse ni persignarse ni llenarse la boca con agua bendita.
Lo peor es seguir con ella, aceptarla en su casa, pasearse con ella en los portales: todos en la ciudad saben que trituró los huesos de su hijito.
Pero… siga paseándola por el portal, váyase con ella al Depilite, solápela en su casa, ofrézcasela a su hijo, para que le siga haciendo la vida de cuadritos.

Luisa Albarrán

sábado, 26 de septiembre de 2009

De un día para otro...

De un día para otro mis zapatos encogieron...

jueves, 17 de septiembre de 2009

En otra parte

A: JAC

Siempre estoy en otra parte
extraño tu lengua en mi ombligo
Tu eres el hombre que recuerda mi carne.
La voz que extraña mi oído.

Luisa Albarrán

Amor mío

Amor mío, mío, mío.
Sólo mío, únicamente mío,
calor mío, fuego mío,
tempestad mía, amargo mío,
dulce mío, frío mío,
mío, mío, únicamente mío

Tuya mi entraña
y todo lo demás que te extraña.

Luisa Albarrán

viernes, 11 de septiembre de 2009

Anda

Anda

Anda, ve por él.

no te quedes callada

no permanezcas inmóvil.

Anda, ve por él,

estréchalo con tu fuego

asfíxialo con tu tormenta

porque en la línea del agotamiento

mi veneno está esperándote

para arrugarte el corazón

y extirparte la frente.

 

Luisa Albarrán

martes, 8 de septiembre de 2009

Frase del día

Soy consumidora de hombres... Me los bebo.

Luisa Albarrán

martes, 1 de septiembre de 2009

Sin nombre

Sin nombre

Cuando te mueras, arrojaré una flor marchita
a tu tumba sin nombre.


La distancia me ha dado un corazón nuevo e insensible:
su causa es matar. Matar todo lo que lleve su esencia.

Hace ocho meses que la herida se abrió con sus actos.
Pedazo por pedazo sus palabras fueron hebrando mi odio por tus pasos.

Desde entonces mis manos no vienen vacías
traigo un picahielos para sacarle los ojos.

Luisa Albarrán